Abrazo simbólico al Hospital Municipal de La Falda
Abrazo simbólico al Hospital Municipal de La Falda
Los Vecinos autoconvocados por el Hospital Municipal de La Falda, concretaron este miércoles un abrazo a la institución en el marco de las actividades que vienen desarrollando con el fin de recuperar las prestaciones que se han visto afectadas por la falta de recursos económicos municipales.
En la faz informativa, Karina Lucero de la Fundación CE.PRO.FA, una de las instituciones convocantes, previo al acto indicaba que “en estos días y sin poder avizorar solución, los profesionales del Hospital Municipal de La Falda se encuentran en una disyuntiva y es que tienen que tomar decisiones muy complejas, como la es la de seguir en total incertidumbre o renunciar.
Atrás quedaron las promesas por parte del ejecutivo de que solo iban a tomar medidas momentáneas, que en poco tiempo volverían a sumarse los dos servicios que se habían “cortado”, parto y cirugía, y se retornaría a la normalidad.
Lejos de esto, el gobierno de La Falda ha puesto mano en el SERVICIO DE GUARDIA bajando de las 24 horas de trabajo a 12 horas, y dejando, por momentos, un solo médico que deberá atender las urgencias que lleguen por ejemplo de accidentes viales, asistir a las personas que vayan llegando con torceduras, caídas, quebraduras, y quienes están internados.
Esta medida generó un malestar porque es imposible para un ser humano tener toda la concentración para estas situaciones sino tiene otro profesional para complementarse, se le suma que hay horarios como por ejemplo en la noche, donde no hay empleadas administrativas para ayudar con las formalidades, otra labor que hacen los médicos de guardia. Asimismo la responsabilidad de equivocaciones o mala praxis que puedan surgir de la atención deficitaria, la cargará el profesional con su prestigio y matricula.
A la deuda salarial sin respuesta, promesas incumplidas y recortes de horas de trabajo, ha llegado la incertidumbre que ha tomado fuerza en algunos profesionales y ha disparado las primeras renuncias, una médica clínica, una dermatóloga y un psicólogo han dejado de sus funciones. Asimismo otros lo están pensando y es entendible, las deudas no esperan, los alquileres no esperan, y como si fuese poco las necesidades básicas y servicios tampoco.
La trama en torno a lo que pasa puertas adentro del Hospital es cruda, no hay insumos y deben dar respuesta con lo que hay, aun así no podemos dejar de decir que pese al panorama los profesionales médicos de guardia, más el personal administrativo y enfermería están brindando la atención mostrando una vez, como ya lo vimos en la pandemia, que la salud es una vocación”.
Exposiciones relevantes
Dra. Carla Soto, ginecóloga y obstetra, trabajando desde hace más de un año en el hospital, exponía que “estoy preocupada por la salud pública en general, no solo pasa acá en la Falda, si no en todos los municipios y en la provincia, quieren hacer desaparecer la salud pública, quieren privatizarla desde todos lados, en todos lados se cobran bonos, hay gente que no puede pagar el más mínimo, Villa Giardino 12.000 pesos, en Huerta Grande 3.000 pesos, en Capilla del Monte será otro tanto. No vamos a poder sostener la salud pública si como ciudadanos no nos preparamos y luchamos para mantenerla, la vamos a perder. Lo que está pasando es que este hospital es responsabilidad de todos como sociedad. Me he formado en salud pública ejerciéndola en todos lados, la amo, pero va camino a la extinción. Decía una colega, los profesionales que hoy se están recibiendo no se quedan, se van, buscando cobrar lo que les corresponde, y acá nos siguen bajando el sueldo, las horas, y la necesidad tienen cara de hereje para muchos. Lamento las bajas de clínicas, de pediatría, teníamos grupos armados, formados, de compañerismo, de buenos trabajadores, de colegas excepcionales con años de formación, pero acá no importan los años, que vengas enfermo, acá somos un número”.
El Dr. Benjamín Malamud, definía que “estamos ante un problema que nos compete a todos, al que no debemos dejar avanzar, porque si no avanza esta ola que a nivel de la nación tiene un espíritu francamente privatizador, se habla primero de tercerizaciones y después de privatizaciones. Los más golpeados son los habitantes de los pueblos, y sobre todo los más desprotegidos económicamente, sin obras sociales o prepagas, que es el que recurre al hospital público y más lo hace en situaciones de crisis.
Hoy más que nunca hace falta la inversión en salud y es lo que se está descuidando. Esta gesta que estamos haciendo es un llamado a la reflexión, para que el Sr. Dieminger no pase a la historia como el que dio el puntapié de cierre a lo más importante de este hospital, que se una a la gestión de los otros intendentes, que se una a la comunidad, que acepte hacer una Audiencia Pública con toda la comunidad, para que podamos defender en conjunto a este hospital, para que siga siendo zonal, intermunicipal, o si se quiere provincial. Tenemos como argumento que la provincia eligió para radicar un nuevo hospital en Carlos Paz, bienvenido sea, pero que no descuiden el norte departamental… La única forma que esto no avance es la participación del pueblo”.
El Dr. Mario Saenz, mantenía que “quiero hacer un llamado al Intendente de nuestra ciudad, la gestión no son solo números, no es solo administración, para gobernar tenemos que tener empatía y sensibilidad hacia la gente, y es lo que estamos viendo que está faltando. El Hospital Municipal es de todos, no podemos permitir que se privatice, no podemos permitir que sea una clínica privada más, es para todos los habitantes de nuestra localidad. Desde ya, que estaremos acompañándolos en esta lucha, porque es una realidad que golpea siempre al más débil, al que menos tiene, y en el hospital el hilo se está cortando por el más delgado y son los profesionales de la salud. No estamos en contra de los profesionales, estamos en contra de esta gestión que trata de privatizar y hacer del hospital una clínica privada, cuando es de todos los vecinos”.
Verónica Correa, enfermera jubilada, con trayectoria en el hospital, manifestaba que “he trabajado en este hospital asistiendo partos, y quiero decirles que la sala de partos es excepcional, no sé si habrá otra igual en la provincia … No estamos acá solo protestando o diciendo lo que pensamos, estamos avalados por un proyecto, que presentó el Dr. Malamud hace cuatro años, y que, sinceramente, determina el cómo salir de este encrucijada con el apoyo de todos los intendentes, que, de hecho, lo tenemos.
Como vecinos autoconvocados, estamos recibiendo opiniones o denuncias de gente que no se anima a hacerlas por miedo a perder su trabajo, por ejemplo, una señorita recibía un salario de 100.000 pesos por armar apósitos, al cerrar el quirófano quedó sin trabajo… un remisero nos informó que la intendencia está pagando 200.000 pesos por día, esto a una remisera podría haber otras, para llevar gente al Funes y cuando no encuentran lugar en el Funes los espera y los lleva a Córdoba. Entonces, si hay para pagar diariamente 200, 300, ó 400.000 diariamente, para llevar a gente que no atienden acá, y a una guardia pasiva de una obstetra la están pagando 170.000 pesos, es una contradicción absoluta, un desmanejo, falta de administración, de humanidad, de sentido común…”.
La manifestación pública culminó con la entonación del Himno Nacional y un cerrado aplauso.