La Falda
Imprescindible y eficiente intervención vecinal en un caso de violencia familiar
La Falda
Imprescindible y eficiente intervención vecinal en un caso de violencia familiar
Escuchamos todo el tiempo que el tejido social está roto, es cierto que con las crisis sociales llega el sálvese quien pueda, por eso es tan importante visibilizar que en la sociedad sigue estando en vigencia la frase africana “para cuidar a un niño se necesita una tribu”, nunca más vigente con lo que pasó en la ciudad de La Falda.
El jueves 16 de enero una adolescente (14 años) se fue a refugiar en hora de la siesta a la casa de una vecina donde le puedo contar que sufría todo tipo de violencias en su casa. La niña vivía sola con el padre quien la tenía a su cuidado por decisión judicial, ya que había pasado por situaciones de violencia en el hogar materno.
Inmediatamente la vecina llama al móvil policial para una intervención adecuada. Pasadas las dos horas, el móvil nunca llegó, se contacta con el Ce.Pro.Fa en la búsqueda de una respuesta, la cual se efectiviza.
Toma intervención la Unidad Judicial de La Falda quien toma las declaraciones correspondientes a varias vecinas que fueron testigos del horror padecido por la joven, avanzada la noche no había donde llevar a la niña para su seguridad, la primera vecina no podía acogerla porque tenía un domicilio muy próximo a la casa del denunciado.
Pasaban las horas y llegando casi a las 23:00 hs decide acogerla otra vecina para no dejarla en la Comisaria (lugar que no es para un niño, niña o adolescente) desde la Unidad judicial se pone en funcionamiento las primeras medidas y consigna policial, ya que todos habitaban en el mismo barrio. Se suponía que debía intervenir el organismo de protección de la niña la SeNAF.
En él mientras tanto el padre de la adolescente, aparentemente por una “filtración”, se enteró que lo habían denunciado y dónde estaba la niña poniéndola en una situación de suma vulnerabilidad.
El día viernes 17 enero se cumple con el protocolo del Polo de la Mujer en Córdoba y la familia de acogida siguió sin tener novedades de ningún organismo. La tensión que se vivió a la noche generó angustias, porque se hizo una especie de acción policial en el barrio donde supuestamente iban a detener a esta persona pero eso no ocurrió. Pasaban las horas sin respuesta de ningún funcionario interviniente y para cubrir las necesidades de la niña, pero la solidaridad del barrio no se hizo esperar, el vecindario acerco ropa, alimentos, productos de higiene e incluso dinero para gastos.
El sábado 18 en horas de la mañana se detuvo al responsable y fue trasladado al Penal de Bouwer generando alivio a la víctima y a la familia que la cuida en estos momentos. Los delitos de lo que se le acusan son de suma gravedad, la causa está caratulada como “abuso sexual gravemente ultrajante”.
LO BUENO, LO MALO Y LO FEO
Las respuestas son criticables y las instituciones intervinientes como los ejecutivos que miran para otro lado cuando suceden estos hechos, deben hacerse eco de estas críticas pensando en las fallas del sistema de protección.
El rol policial tuvo su dualidad, no puede ser que haya pasado dos horas desde que la vecina llama al 911 diciendo que tiene una persona menor de edad que se refugia en su casa pidiendo ayuda, y no llegue el móvil. Por otro lado fue ejemplar la empatía del personal policial que intervino, traslado a Córdoba y estuvo en el cuidado de la familia.
Que el poder judicial haya tenido a esta adolescente y quienes la acompañaban desde las 16:00 hs. a casi la media noche en la comisaria. Es revictimizante para la niña y para quienes estaban protegiéndola. Una de las vecinas me decía “la chica de la Unidad judicial no sabía qué hacer con la niña y me insistía que la lleve a mi casa, yo no la puedo llevar porque estoy muy próxima a él”.
Comunicándome con la Delegada de la Secretaria de niñez, adolescencia y familia – SeNAF, le explico al situación y me contesta que ellos estaban al tanto y en comunicación con la Unidad Judicial; me pregunto… y las respuestas? Pensemos que es el órgano de intervención en materia de protección de las niñeces, asimismo la niña ya venía con una intervención y NO HUBO SEGUIMIENTO sino se hubiesen dado cuenta lo que estaba viviendo.
Vuelvo a decir una vez más, que es de suma importancia tener un área local de niñez en La Falda, mientras no comprendamos la urgencia vamos a seguir revictimizando a nuestras infancias. El área no es una cuestión de buenas intenciones, lo exige la Convención por los derechos de los niños, niñas y adolescentes, más en la realidad en la que estamos inmersos.
Toda esta incoordinación y el vacio del estado se diluyen por la intervención de estas valientes mujeres que a pesar de la soledad y de sus propios miedos, protegieron y se brindaron para escucharla, cuidarla, acompañarla y darle el marco de amor necesario que merece cualquier persona que esté en desarrollo. Sin ninguna duda esto la ayudará a poder procesar de otra forma sus traumas sabiendo que en el mundo existen malas personas pero también de las otras, las que se comprometen y sostienen en los momentos más difíciles y tristes.
Karina Lucero
Ce. Pro.Fa.