EL AGUA QUE UD. ES…!!!
Desde el advenimiento de la democracia, la gestión pública de la administración del agua en nuestra ciudad ha sido atravesada por políticas erráticas y con un conformismo insustancial, si se quiere la expresión de la sociedad en su conjunto… al respecto, me parece muy ilustradora la expresión de Javier Martínez Gil Doctor en Hidrología por la Soborna y en Geología por la Universidad de Barcelona: “En estas circunstancias, comprendimos que no habría nunca solución posible a ese panorama de apetencia insaciable por el agua, mientras no fuéramos capaces de instaurar nuevos criterios sociales con los que entender el significado del agua y de los ríos no solo para la naturaleza sino también para el alma humana, desde una percepción holística, total e integradora, a partir de la cual poder instaurar una ética y una responsabilidad necesarias, que nos permitieran entender que dentro de un límite, los ríos están donde tienen que estar, porque su presencia y la cuantía de sus caudales son el resultado de un complejo equilibrio planetario. Que no hay ríos a los que les sobre ni a los que les falte agua, que son escusas nuestras para justificar en la torpeza de nuestra propia naturaleza. Mucho antes de que el ser humano apareciera en el escenario de la Tierra, los ríos ya estaban ahí, desarrollando con su presencia una serie de funciones y generando equilibrios, que se extienden desde su cabecera hasta el mar, incluso dentro del mar también”.
Los informes de Naciones Unidas sobre medio ambiente son alarmantes, poco tiempo atrás el secretario general Antonio Guterres advirtió que la era del Cambio climático había finalizado y comenzó la era de la ebullición global, es posible que esto genere pánico sobre todo en los más jóvenes, como lo manifiesta el Secretario General de Las Organizaciones Meteorológicas Mundial (OMM) Petteri Taalas “se crea una suerte de ecoansiedad ….pero tampoco es para soslayar la relevancia que tiene la situación para la protección de los eco sistemas y en particular de nuestra calidad de vida…” no es que vayamos al fin del mundo resalta OMM mas bien a una escala de grises para el futuro.
Hay mucho por hacer en nuestra ciudad, debemos ser capaces de controlar esta sed insaciable de poder; de elevarse en la jerarquía del picoteo, que el hombre y las instituciones por él creadas manifiestan frente a otros hombres y otras instituciones, se hace especialmente ostensible en la Naturaleza. Y sobre esto se ha reflexionado en abundancia… siempre que utilicemos nuestros conocimientos para la satisfacción a corto plazo de nuestros deseos de confort, seguridad o poder; encontraremos, a plazo algo más largo, que estamos creando una nueva trampa de la que tendremos que librarnos antes o después.
Es posible que la solución radique en ensanchar la conciencia moral en nuestra sociedad. Al respecto, sito un principio rector del Consejo Federal Argentino del Agua “Alcanzar la plena gobernabilidad del sector hídrico requiere del compromiso y el accionar conjunto de los organismos de gobierno y usuarios del agua para democratizar todas las instancias de la gestión hídrica. La dimensión ética en el manejo de las aguas se lograra incorporando a la gestión diaria la equidad, la participación efectiva, la comunicación, el conocimiento, la trasparencia y especialmente la capacidad de dar respuesta a las necesidades que se planteen en el sector”.
Esta toma de conciencia que deberíamos encarnar, en especial por nuestra juventud que ha heredado no pocas construcciones sociales indeseables y que son los que justifica nuestra esperanza….!!.
Nací aquí, vivo aquí en esta hermosa ciudad de la Falda, mi familia se encuentra en estas tierras desde 1909, y escribo este texto parafraseando a un lúcido escritor: “Para que el agua se ponga en pie y, encarnada en la voz crítica de los autores, nos hable de su drama en manos del desarrollismo moderno, de la codicia que alimenta a la estirpe humana en su carrera hacia un antropocentrismo omnipotente y destructivo”… ” Invitar a conocer el agua que usted es”, y que mediante el diálogo físico y sistémico con el entorno va y viene de un estado a otro, de una naturaleza a otra. Detrás de nuestros nombres, según la ciencia, habita un ser perteneciente al linaje homo sapiens, nacido del intercambio con la biosfera y con el cosmos. Un cambalache biológico y afectivo que hace posible la vida en un espacio-tiempo determinado: el hoy heredado, la presunción del hoy que ya se está yendo y que, para vivirlo con consciencia y gratitud, debemos procurar un equilibrio vital entre lo que hacemos, sentimos y pensamos como naturaleza propia en el mundo”.
Javier Benavidez